Conjeturas
Por
Francisco Cruz Angulo
En veinte días más habrá concluido las llamadas campañas
internas de los tres aspirantes a la presidencia de la república. Sin embargo
sus campañas de proselitismo han ido más allá de su militancia interna y sus
posicionamientos políticos-electorales han trascendido a todos los sectores de
la población ya sea por los medios de comunicación que les dan amplia cobertura
informativa y analítica y por las redes sociales.
¿Cuál ha sido la actitud de los tres cuasi candidatos
presidenciales de las tres alianzas y la percepción pública que se tiene de
ellos?
Del precandidato Dr. José Antonio Meade de la alianza “Todos
por México” que la integra el PRI-PVEM y PANAL da la impresión que no tiene
brújula que la oriente. El Sr. Meade y sus asesores de campaña se mueven en
arenas movedizas a consecuencia de que están atrapados en las profundas
contradicciones del gobierno de Enrique Peña Nieto del que no pueden deslindarse
porque son uña y carne de su régimen de gobierno. Por lo tanto Meade y sus
aliados están obligados a defender lo indefendible como son los problemas de la
fallida guerra en contra de las bandas delincuenciales; la pus de la corrupción
e impunidad que aflora en las distintas áreas de la administración federal y de
varios gobernadores priístas que saquearon al Erario estatal y la creciente
desigualdad social.
Ante estos problemas que enfrenta el actual régimen de
gobierno priísta el Sr. Meade y su partido optan por exaltar sus egos académicos
y formulas macroeconómicas que nadie entiende mientras que su discurso político,
a falta de argumentos recurre a la descalificación de sus adversarios mediante
adjetivos “loquitos”, ocurrentes, dictadorcitos, son un peligro para México,
que ni trabajan ni estudian y que el “peje” está siendo asesorado y financiado
por los rusos.
En fin la precampaña del Dr. Meade es como el agua: incolora,
inodora e insípida, por lo cual hoy ocupa un tercer lugar en la intención del
voto…
Anaya puede
ser competitivo.-El precandidato presidencial de la alianza “Frente
por México” PAN-PRD y Movimiento Ciudadano
todavía no articula bien su campaña de proselitismo electoral quizá
porque está más ocupado en cohesionar a los dirigentes y militantes de su
partido y ganarse la confianza de los militantes y simpatizantes de sus aliados
del PRD y Movimiento Ciudadano porque no basta cambiar de chaqueta para ganar
adeptos.
Sin duda Ricardo Anaya tiene talento y cultura política y
sobre todo un audaz pragmatismo para lograr sus objetivos.
Asimismo tiene a su favor el apoyo incondicional de 15
gobernadores, cientos de presidentes municipales, una numerosa bancada en el
Congreso de la Unión y de la totalidad de la estructura territorial del
blanquiazul así como de sus órganos de gobierno, es decir dispone de una fuerza
política superior a la del PRI y aliados.
Ahora bien el hecho de haber concretado una alianza a la
presidencia de la república con dos partidos ideológicamente antagónicos habla
bien de su capacidad de negociación en base a construir un gobierno de
coalición sostenido por agendas prioritarias comunes.
Lo que tienen claro Ricardo Anaya y sus aliados es la de
convencer a millones de ciudadanos que su proyecto de gobierno es más verosímil
al que encabeza Andrés Manuel López Obrador precandidato de la alianza “Hagamos
Historia” integrada por MORENA, PT y Encuentro Social.
Ante tal reto Ricardo Anaya primero tendrá que confinar hasta
el tercer lugar al candidato priísta Sr. Meade y en una segunda fase confrontar
a López Obrador por el primer lugar.
En cambio el político tabasqueño López Obrador va en caballo
de hacienda. Su movimiento político electoral crece como bola de nieve día a
día mientras sus adversarios le tiran arañazos. El político tabasqueño continúa
marcando la agenda de la competencia presidencial en tanto que actúa como si ya fuera jefe de estado al
anunciar en esta primera etapa de la competencia a lo que podría ser su
gabinete de gobierno así como la de anunciar cuál será su política de seguridad
pública y de cómo combatirá la corrupción y la impunidad que son hoy en día dos
flagelos que agobian a la sociedad mexicana; de esta forma concita
inusitadamente el apoyo de sectores de la población que antes no comulgaban con
su movimiento.
Hasta
el día de hoy el barco de MORENA conducido por López Obrador va viento en popa.
Cada día se sube más gente a ese barco. El riesgo es que lo hundan antes de
llegar a seguro puerto…