Conjeturas
Por
Francisco Cruz Angulo
El Gobernador, Roberto Sandoval al vislumbrar una permanente
confrontación en los próximos tres años entre los ayuntamientos y el SUTSEM por
el pago oportuno de los salarios y demás prestaciones sociales suscribió un
acuerdo político con la Sra. Águeda Galicia, lideresa del SUTSEM en el que se
comprometieron a desactivar esa bomba de tiempo en los siguientes términos. A
saber:
1.-EL Gobierno del Estado será el aval para obtener un
crédito bancario de 500 millones de pesos con el fin de que se pague a los trabajadores
sindicalizados de los 20 ayuntamientos las dos quincenas que restan más las
prestaciones laborales que no se han pagado.
2.-Que a partir del mes de septiembre los presidentes
municipales salientes y entrantes deberán firmar un convenio con el SUTSEM en
el que reconocerán ese pasivo laboral y que los presidentes entrantes deberán
pagar en un plazo de tres años.
Este gesto de buena voluntad del mandatario nayarita
resolverá a corto plazo el problema pero no de fondo. Veamos por qué.
1.-En principio habrá que determinar cuál es el pasivo
laboral real que tienen los ayuntamientos con el sindicato. Las cifras que
divulga el sindicato son diferentes a los que manejan los alcaldes.
Para citar un ejemplo, Águeda Galicia dice que el ayuntamiento
de Tepic les debe a sus trabajadores cerca de 130 millones de pesos en tanto
que el “torito” solo acepta una deuda de 30 millones. Lo mismo ocurre en el
resto de los ayuntamientos. No coinciden las cifras.
El problema radica en que la lideresa del SUTSEM da como un
hecho prestaciones laborales que hoy se están litigando en los tribunales
laborales.
La mejor manera de destrabar este problema es que se instalen
mesas de negociación con el apoyo de expertos en la materia a fin de homologar
esos adeudos. No se trata de satisfacer caprichos sino la de encontrar una
razonable solución para ambas partes.
2.-Como el mencionado crédito de 500 millones de pesos lo
pagará la entrante administración municipal en un plazo de 3 años vamos a ver
que responden los 20 alcaldes electos, sobre todo los que estarán gobernados
por partido de oposición.
3.-En el susodicho acuerdo entre el Gobernador y la líder del
SUTSEM extrañamente para nada se mencionan a los trabajadores de lista de raya
y a los de confianza a los que también se les adeuda salarios ya devengados. O
todos coludos o todos rabones.
De llegarse a concretar ese acuerdo será de resultados pírricos
ya que solo postergará el conflicto laboral incluso en peores condiciones para
los ayuntamientos ya que pagarán esa deuda mensualmente a un plazo de tres años
y además se comprometen a pagar con
puntualidad los salarios de los trabajadores sindicalizados, compromiso que
sale sobrando puesto que es un derecho constitucional; y aún más so pena de ser
llevados a los juzgados penales. No creo que los próximos alcaldes se echen la
soga al cuello.
Y la deuda a proveedores, a la banca privada y al mismo
Gobierno Estatal acumulada desde hace varios trienios, ¿Quién la pagará? No
creo que se pague de los bolsillos de los Ediles salientes.
Esas enormes deudas que vienen de las anteriores
administraciones inevitablemente serán
heredadas institucionalmente a los próximos gobiernos municipales. ¿Cómo la
enfrentarán? Ese es el dilema.