Conjeturas
Por
Francisco Cruz Angulo
Así como el Gobierno de Nayarit puso fin al control del
aparato administrativo de los SEPEN por la Sección 20 del SNTE al inicio de su
mandato, el gobernador de Oaxaca Gabino Cué apoyado por el Gobierno de Peña
Nieto asestó un duro golpe a los dirigentes de la Coordinadora Nacional de
Trabajadores de la Educación (CNTE) al desaparecer por decreto administrativo
al instituto de educación (IEEPO) de esa entidad y en su lugar crear un instituto
educativo descentralizado con autonomía y recursos propios.
Con esta envestida y sorpresiva acción de gobierno pone fin
al férreo control educativo que tenían los líderes de la Sección 22 durante 23
años en los cuales cometieron los mismos vicios de su adversaria y hoy en la
cárcel Elba Esther Gordillo.
Esta organización sindical que nació como reivindicadora de
la autonomía sindical, el mercadeo de plazas, el clientelismos electoral y la corrupción,
y que la asignación y promoción de plazas fuera por méritos académicos y no por
influyentismo o lealtades personales y de una educación popular, laica y
gratuita degeneró en una organización seudo marxista mediante la cual desde aquel estado adoctrinaban a los niños y jóvenes
para extender la mecha de la revolución en todo el país en vez de cumplir su
tarea educativa.
Con esta careta ultraizquierdista encubrió las numerosas
prebendas que obtuvo a partir del gobierno priísta de Heladio Ramírez quien prácticamente
les entregó el control total del sistema educativo federal en aquella entidad vapuleado
por la extrema pobreza.
Con este poderoso eje de apoyo gubernamental extendió su
influencia en los estados de Chiapas, Tabasco, Morelos, Guerrero, Michoacán,
Distrito Federal y en el Estado de México y en menos medida en otros estados de
la república. No obstante su permanente beligerancia sus agremiados no alcanzan
más allá de los 250,000 profesores de un universo de más de un millón de
docentes, los más alineados en el Sindicato Nacional de Trabajadores de la
Educación (SNTE).
El radicalismo de izquierda de la CNTE lejos de mejorar la
educación de los niños y jóvenes oaxaqueños la degradó a consecuencia de que
daban clases la mitad del ciclo escolar por sus continuos paros y
movilizaciones en aquella entidad y en la Ciudad de México en oponerse a
cualquier reforma educativa que lesionara sus intereses gremiales. Al ser
jueces y parte hicieron de la educación lo que les vino en gana. Se calcula que
los líderes de la CNTE en Oaxaca manejaban alrededor de 15,000 millones de
pesos destinados a la educación sin rendir cuentas a nadie.
Este permanente desafío al estado se hizo insostenible para
el Gobierno Estatal y Federal a partir de su pertinaz resistencia a la reforma
educativa, en especial al sistema de evaluación para acceder a plazas y
ascensos escalafonarios y al cumplimiento total de los días laborables del
ciclo escolar su pena de ser sancionado.
Como no hubo ninguna manera de convencerlos del lado positivo
de la reforma y se empecinan en buscar por su abrogación constitucional las
autoridades estatales y federales endurecieron sus posiciones.
Como señalé al inicio de esta columna, primero desaparecieron
por decreto el instituto estatal educativo la creación de un organismo autónomo;
dos, se blindó con la fuerza policiaca y militar a todas las instalaciones
administrativas de educación y lugares estratégicos para la seguridad pública;
tres, se congelaron todas las cuentas bancarias de la administración educativa;
cuatro, la advertencia de girar ordenes de aprehensión en contra de decenas de
dirigentes de la Coordinadora por presuntos delitos de vandalismo, destrozos al
patrimonio público, daños a propiedad privada durante sus marchas y otros
delitos del orden común y federal. A la vez el Gobierno de la República
destinará 1,000 millones de pesos para la rehabilitación de la infraestructura
escolar en todo el estado e incrementar becas a un número mayor de estudiantes
del sistema básico.
Obviamente esta estrategia gubernamental los agarró de
sorpresa y en periodo de vacaciones, por lo que su reacción fue tardía.
Al estrangular las fuentes de financiamiento para sus
movilizaciones y plantones los liderazgos de la CNTE enfrentarán al estado en
condiciones de debilidad. Si en los orígenes de esa organización tuvo el apoyo
popular en Oaxaca hoy lo perdió.
Durante una manifestación poco concurrida de la Coordinadora
en aquella entidad amenazaron que no iniciarán clases en el próximo ciclo
escolar hasta que se abrogue el decreto administrativo del gobernador Gabino
Cué y la reforma educativa.
Creo que el único asidero que tiene la CNTE es la negociación
política poniendo por delante la calidad educativa de la niñez y juventud oaxaqueña
y una mejor infraestructura escolar que hoy en día está para llorar.
Los intereses de un grupo gremial no pueden estar por encima
de los intereses del pueblo que dicen defender.
Son tan extremista los líderes de la CNTE que rechazaron con
enfado el apoyo de López Obrador fundador y líder del Movimiento de Regeneración
Nacional (MORENA).
La historia nos enseña que el radicalismo de la extrema
izquierda o de la derecha conduce al totalitarismo y a la pérdida del Estado de
Derecho.
Así pues, la recuperación del sistema educativo en Oaxaca
apenas inicia. Veremos cómo enfrentará el Gobierno Federal y Estatal el boicot
al inicio del próximo ciclo escolar en agosto próximo que anunció en días
pasados su dirigente nacional Rubén Núñez. Entonces conoceremos la fuerza real
de la CNTE, ya sin el control del aparato administrativo de la educación en
aquel estado sureño…