Por Francisco Cruz Angulo
La Sra. Águeda Galicia continúa ejerciendo la presión
política en las calles con el fin de conservar los privilegios del Sindicato
Único de Trabajadores al Servicio del Estado y Municipio (SUTSEM).
Así lo hizo sentir con la multitudinaria manifestación por la
Avenida México sucedida el pasado sábado en donde participaron la mayoría de
sus agremiados de todo el Estado, otras organizaciones gremiales como la del
Magisterio Federal y Estatal y cientos de tepicenses que se sumaron a la
manifestación.
Esta manifestación tuvo varios ingredientes y un solo
destinatarios:
1.-Fue la respuesta de la lideresa sindical al frente de 20
alcaldes que en días pasados pusieron un hasta aquí a las exageradas demandas salariales y de otras prestaciones
sociales del SUTSEM sin considerar las condiciones económicas críticas por la
que atraviesan cada uno de los ayuntamientos.
Si bien los trabajadores tienen derecho a mejores salarios y
demás prestaciones sociales, de igual manera tienen la responsabilidad de no
tronar a sus fuentes de trabajo; más aún cuando está en juego una
representación popular (ayuntamientos) que están obligados a otorgar servicios
y obra pública a la comunidad.
2.-Se suponía que esa marcha era ventilar los problemas
sindicales que enfrenta el SUTSEM en contra de los 20 alcaldes; proponer
medidas conciliatorias y de arribar a acuerdos. Ocurrió todo lo contrario dos
días antes se inició un intenso volanteo por toda la ciudad en donde se llamó a
participar en esa marcha para protestar en contra del ayuntamiento de Tepic al
que se le responsabilizó de tener a las calles en total abandono; a protestar
por un mal servicio de agua potable y recolección de basura; a rechazar los incrementos
en las tarifas del agua potable, impuesto predial y demás servicios públicos. Y
la mentira mayor: que se privatizarán los servicios del agua potable y la
recolección de basura.
Los señalamientos arriba mencionados son ciertos, solo que el
incremento a los servicios públicos fue
autorizado en la Ley de Ingresos del municipio de Tepic por el Congreso del
Estado. Y en cuanto a la privatización de los servicios de agua potable y recolección
de basura el mismo “torito” se ha encargado de desmentir esa versión.
¿Por qué los diputados de las organizaciones participantes y
la misma dirigente sindical no dijeron ni pio en la tribuna del Congreso ni lo
hicieron público en su momento incluyendo el no haberse opuesto a los
incrementos en los servicios que otorga el Gobierno Estatal? Por lo tanto se
deduce que esa marcha tuvo por objetivo la cabeza del presidente municipal de
Tepic, Héctor González Curiel, todo porque fue él la cabeza visible y la voz
cantante del frente de Ediles que tuvieron la osadía de poner freno a la
intolerancia de la Sra. Águeda que cada vez que tiene alguna desavenencia
contra algunos de ellos toma las instalaciones de los ayuntamientos, bloquea
calles y recientemente hasta bloqueó el libramiento carretero al sur de esta
capital.
3.-Al dar tribuna abierta a la gente era obvio que el “torito”
fuera víctima de toda clase de insulto,
incluyendo las que se inscribieron en las pancartas de los manifestante;
incluso hasta necedades como la de pedir su renuncia o revocarle su mandato.
Para empezar un puesto de elección popular es irrenunciable y
la revocación de mandato no está contemplada en la nueva Ley de Participación
Ciudadana, derecho de los ciudadanos a los que se opuso el Partido al que
pertenecen los principales organizadores de la susodicha marcha. Estamos pues,
ante un doble discurso.
Por otro lado si los ayuntamientos vienen cargando con
pesadas deudas públicas también tienen una enorme responsabilidad las
anteriores administraciones municipales pasadas. ¿Por qué no se demandó
fincarles responsabilidades penales y administrativas a todos aquellos alcaldes
que concedieron enormes prebendas laborales por motivaciones políticas-electorales?
Ahora se enojan de lo que todos son corresponsables en la
crisis financiera del Gobierno Estatal y de los 20 ayuntamientos.