En contra de todos los vaticinios el movimiento lopezobradorista va de más a menos de acuerdo a las últimas encuestas de opinión para conocer quién podría ser el mejor candidato a la presidencia de la República de militantes y simpatizantes de todas las izquierdas de este país.
Paradójicamente Andrés Manuel López Obrador continúa con el apoyo de la mayoría de militantes perredistas, pero a partir de los dos últimos meses Marcelo Ebrard, Jefe de Gobierno del Distrito Federal se ha venido posicionando en la sociedad civil a tal grado que de estar prácticamente en la lona ha repuntado notoriamente en el ánimo de la gente sin militancia partidista, pero simpatizantes de un proyecto democrático y de izquierda.
En este despegue del Jefe del Gobierno capitalino tiene mucho que ver su personalidad conciliadora, su respeto a la pluralidad y su peculiar estilo de gobernar que le ha merecido el reconocimiento de organismos internacionales.
Otro punto a su favor es su cada día más frecuente deslinde de la tutela política de Andrés Manuel López Obrador. En su calidad de Jefe de Gobierno asumió recientemente la presidencia de la Conferencia Nacional de Gobernadores (CONAGO) desde el cual viene manteniendo un dialogo permanente con todas las fuerzas políticas del país y de los tres poderes de gobierno. Recientemente se ganó una andanada de ataques de la corriente lopezobradorista por voz de Martin Batre, quien lo calificó de traidor a los ideales de izquierda por el simple hecho de haber saludado de mano al presidente Felipe Calderón después de su V Informe de Gobierno.
Este golpeteo al interior de las filas del PRD originó que Marcelo Ebrard despidiera a Martin Batre como Secretario de Desarrollo Social del gobierno capitalino. Lo más probable es que en el corto o mediano plazo los lopezobradorista se lancen a la yugular del precandidato presidencial. Como es imprevisible como vaya a reaccionar “el peje” ante este hecho existe el riesgo de que se quede en el aire el acuerdo político pactado en semanas recientes de que sea una encuesta abierta a toda la ciudadanía la que determine quién será finalmente el candidato del PRD y de otras organizaciones de izquierda, incluyendo el Movimiento de Renovación Nacional (MORENA) que liderea el político tabasqueño.
Por lo pronto, Marcelo Ebrard está tejiendo en todo el país bases de apoyo a sus aspiraciones presidenciales. En días recientes estuvo en Nayarit una asambleísta del Distrito Federal cuya misión es impulsar la Fundación de los demócratas de izquierda. En Nayarit asumió el cargo como Coordinador Estatal el ex diputado priista Pablo Montoya de la Rosa, quien un año antes se desempeñara como coordinador estatal de la Fundación “Luis Donaldo Colosio”.
Por supuesto, el Partido del Sol Azteca atrajo a un excelente cuadro político, denostado ayer por las huestes priistas. Por cierto, ¿Cuándo será el relevo en la dirigencia estatal del PRD? Son muchos los tiradores. Esperemos que asuma el mando un nuevo cuadro político que ponga en movimiento a ese partido en la lucha social.
