Por
Francisco Cruz Angulo
Como el
ilustre Jesús Reyes Heroles señalaba en más de una ocasión que en la política la forma el fondo.
Previo a la
celebración del día de la Libertad de Expresión el Secretario de Turismo y
Comunicación Social del gobierno del Estado
envió un oficio a los dirigentes de las organizaciones de periodistas en donde se les invita a que
todos sus agremiados se inscriban en un
padrón único de periodistas de esa dirección del Gobierno Estatal.
A decir del Lic. Rodrigo Pérez Hernández se pretende
depurar a quienes se ostentan como periodistas sin serlo y utilizan el
membrete como patente de corso. Subrayó que de esta manera se apoyará a quienes
son auténticamente periodistas y brindarles todas las facilidades para ejercer su oficio.
Este padrón
de periodistas genera varias reflexiones; a saber:
1.- ¿En la
actual administración estatal será necesario portar una credencial expedida por la oficina de prensa que lo
certifica como periodista y como tal tendrá derecho al acceso a todas las
prorrogativas que ofrece el Gobierno Estatal?
2.- ¿Quién
no sea credencializado perderá todos estos derechos incluido el acceso a las
fuentes oficiales de información?
3.- ¿El
Gobierno Estatal desconocerá la existencia de aquellas organizaciones de periodistas que no estén protocolizadas
legalmente?
Hasta el día
de hoy no tenemos información que en alguno de los estados de la República los
gobiernos estatales pretendan credencializar a los trabajadores de la
comunicación.
Lo que sí es
una regla común es que cada una de las organizaciones de periodistas envíen cada
año su padrón de afiliados actualizados y los datos generales y lugares de
trabajo o de colaboración en donde
prestan sus servicios.
Otra
práctica común es que la
credencialización de los periodistas y colaboradores la hacen las empresas
periodísticas o las organizaciones gremiales. Por ejemplo, sería
una falta de ética profesional que los reporteros de televisa o de El
Universal para ser acreditados como tales tuvieron que portar la credencial con
el logotipo de la presidencia de la república y no la credencial de su empresa.
Eso sí, en
eventos especiales de carácter oficial necesariamente los reporteros deben
portar un gafete oficial como invitados especial.
Incluso los
reporteros de la fuente presidencial deben llevar un gafete que los acredite
como tal.
Todas estas
inquietudes se las hicimos del conocimiento
los coordinadores de la Unión de Columnistas y Articulistas de Nayarit al Lic.
Rodrigo Pérez durante un rápido encuentro.
El titular
de comunicación nos aseguró que no es una medida obligatoria ni atentatoria a la Libertad de asociación: que la afiliación
será voluntaria y que no repercutirá
negativamente en los derechos de los trabajadores de la comunicación; que el
único interés que tiene el Ejecutivo Estatal es conocer realmente quienes ejercen
el periodismo para brindarle todas las facilidades para el desempeño de su
labor y otorgar diversos apoyos que demanda el gremio de los periodistas.
En reunión
previa los dirigentes de 7 organizaciones de periodistas al tratar el asunto
del empadronamiento de periodistas en las oficinas de la dirección de
Comunicación del Gobierno Estatal por unanimidad se decidió que cada
organización consulte a sus afiliados porque no se debe tomar una decisión a
priori sin ponderar sus consecuencias éticas y políticas y su impacto en la
libre organización y manifestación de las ideas. Si ya de por sí nuestro gremio
está muy desacreditado ante la opinión pública, ahora mostrando una credencial
del gobierno, entonces nos reclamarán con justa razón, en donde quedó
la respetuosa distancia entre
medios de comunicación y el gobierno. La unidad se construye en el respeto
mutuo, no en la subordinación.