Conjeturas
Por
Francisco Cruz Angulo
Si bien el mandatario estatal, Roberto Sandoval hace un buen
gobierno a favor de la gente eso no quiere decir que su partido el tricolor
tenga asegurada la victoria en todos los municipios y distritos electorales en
los comicios de julio próximo.
Gran parte dependerá que los candidatos tengan arraigo
popular, promuevan un buen proyecto de gobierno en el que integren las
principales demandas de la población y,
además, que sean creíbles.
Como lo señalé en columna anterior si las precandidaturas de
unidad cumplen con estas características saldrán victoriosos aunque hayan sido negociadas
de facto.
Sin embargo parece que en varios municipios se están
manifestando situaciones de inconformidad. Por el momento voy a citar dos
ejemplos que me constan.
El primero de ellos es en Rosamorada. Allá el PRI tomó la
decisión de designar como precandidato de unidad al Sr. Tomas Cervantes, hijo
del que fuera alcalde de aquel municipio. De acuerdo a la opinión de la gente y
de algunos presidentes de comisariados ejidales su administración fue de saqueo
de bienes públicos y de escasa obra pública.
Para oponerse a la continuación de ese nepotismo gente de la cabecera
municipal, Pimientillo, Pericos, el Tamarindo, San Vicente y Chilapa decidieron
recolectar la documentación para registrar como candidato independiente del ex comisariado ejidal de Pimientillo, Álvaro
Arellano Bernal quien cuando desempeñó ese cargo se distinguió por haber
empedrado gran parte del ejido de
Pimientillo de donde es originario, hizo gestiones hasta que se introdujera la
telefonía rural y la obra más importante fue la construcción del CECyTEN que
otorgó una opción de enseñanza técnica para cientos de jóvenes de aquel
municipio y aledaños.
De lograr su registro legal será la primera candidatura
ciudadana como una clara respuesta de la ciudadanía a lo que consideran una
imposición de candidatos al sentir popular.
Si a pesar de los numerosos obstáculos que habrá de enfrentar
el Sr. Álvaro Arellano como candidato independiente y logra la victoria será el
primer revés político que reciba la partidocracia.
El otro caso es en Ixtlán del Rio. Al haber designado como
precandidato de unidad al Sr. José Alvarado. Ante el fracaso de la
administración panista encabezada por el
“Chato Muñoz, numerosos sectores de la población miran como una buena opción de gobierno
municipal a la Profra. Marisol Sánchez Navarro, quien en las elecciones
estatales pasadas obtuvo el segundo lugar en votación.
La Profra. Sánchez Navarro es conocida por su arraigo
popular; por su capacidad y por su formación de los más altos valores humanos.
Si bien competirá bajo las siglas del Partido del Trabajo, y
por lo tanto, no tendrá a su disposición un bien armado aparato logístico como
lo tienen los partidos más grandes; pero si tiene el apoyo de la gente y logra cubrir
con sus representantes en todas las casillas electorales y los ixtlenses salen
a votar podría ganar la elección a la alcaldía de ese municipio sureño.
Este pasado domingo estuve en aquella población por razones
familiares y en pláticas con conocidos líderes sociales me percaté que tanto priistas, panistas y perredistas inconformes
de la manera como sus partidos están designando a sus candidatos, unos optarán
por la abstención y otros por la Profra.
Marisol Sánchez Navarro.
Los candidatos de unidad tienen éxito electoral cuando
mediante un ejercicio democrático son consensuadas por todas las corrientes y
liderazgos políticos al interior de cada partido. De no ocurrir así la misma
militancia les pasa la factura en las urnas.