Conjeturas
Por
Francisco Cruz Angulo
Como testigos de honor el Secretario de Desarrollo Social,
José Antonio Meade, el director general del IMSS, Mikel Arriola Peñalosa y el
Gobernador del Estado, Roberto Sandoval Castañeda atestiguaron la entrega de 89
mil afiliaciones para igual número de estudiantes que cursan estudios de
enseñanza medio-superior en los distintos planteles del sector público en
nuestra entidad.
La entrega de esos beneficios se hizo en las instalaciones de
la Universidad Tecnológica de Nayarit ubicada en el municipio de Xalisco,
Nayarit. Por supuesto eso es un gran beneficio a las familias de los miles de
estudiantes.
El problema radica de si esa institución de seguridad social
será capaz de ofrecer una atención médica-hospitalaria de calidad y eficiencia.
El sentido común nos indica que entre más derechohabientes se
incrementa es necesario la contratación de más médicos, enfermeras y el
suficiente equipamiento médico-hospitalario; de no ocurrir así disminuirá la
calidad de sus servicios de salud más aun cuando en los presupuesto del sector salud decrecieron en los últimos
años si se toma en cuenta el volumen que
a diario son afiliados.
De continuar esta tendencia, el IMSS podría colapsarse.
Esta misma situación prevalece por la continua afiliación en
el Seguro Popular.
Es cierto que ese proyecto de salud popular ofrece cobertura
médica a millones de personas que carecen recursos económicos lo cual es
plausible; sin embargo está documentado la mala calidad de sus servicios en los
hospitales en primer y segundo nivel.
Los afiliados a esa institución de salud tienen que lidiar
con médicos neuróticos quienes abrumados por largas horas de trabajo atienden
casi en automático a los enfermos. Luego
los familiares de los enfermos se encuentran con el desabasto de medicamentos,
los que se obligan a comprarlos en farmacias comerciales en detrimento de sus raquíticos
bolsillos.
Lo que sí es de reconocer son los buenos servicios que se
ofrecen en el área de Toco cirugía de Maternidad y en el Instituto Estatal de
Cancerología del Hospital General de
Tepic, éste último dirigido atinadamente por la Dra. Amelia Rodríguez Trejo.
Dan testimonio de ello cientos de enfermos y familiares que reconocen
que en esos centros hospitalarios el ser atendidos con calidad humana y
eficiencia profesional de su personal médico, enfermería y administrativo,
sobre todo en cancerología.
En ambas clínicas de salud sus servicios
médicos-hospitalarios son totalmente gratuitos ya que van a cargo del llamado
Seguro Catastrófico.
Quisiéramos los nayaritas, sin duda alguna que todos nuestros
compatriotas que carecen de recursos económicos tuvieran garantizados los
servicios de salud universal, gratuitos y de calidad; lamentablemente dada la
situación económica por la que atraviesa el país será hasta cuando se reactive
sostenidamente nuestra economía cuando se tenga acceso a un buen sistema de
salud pública.
Por ahora atiborrar esas instituciones con más afiliados y en
estos tiempos de crisis económica evidencia un tufillo de carácter preelectoral…
Merecido
reconocimiento.-El viernes pasado la XXXI Legislatura que preside el Dip.
Jorge Humberto Segura López entregó merecidos reconocimientos públicos a
nayaritas que se han destacado en la
cultura, el arte, el deporte, empresarial, de filantropía y a otros profesionistas
destacados de la vida política, social y cultural de Nayarit.
Destaco a uno de ellos sin menospreciar a los demás.
Ese personaje es el Profr. Miguel González Lomelí que durante
años se desempeñó como director de la ETI. No. 1 ubicada en esta capital.
Durante su gestión procuró innovar los métodos de
enseñanza-aprendizaje, con el claro propósito de formar jóvenes con una visión plural
del mundo y la de alentar sus talentos personales con una clara formación
humanística y de compromiso social.
Además el profesor oriundo de Jala, Nayarit durante décadas
escribió diversos textos en prosa y poesía
de una gran calidad literaria, sensible a los nobles sentimientos del corazón y
de la naturaleza. Su poesía es de una gran frescura juvenil por la gran
emotividad de sus versos que nos hacen revivir a nuestras vivencias de nuestros
años mozos.
Que decir de su descarnado relato cuando estuvo durante días
enterrado bajo los escombros de uno de los edificios de la unidad habitacional
de Tlatelolco en la capital de la república en aquel aciago día de septiembre
de 1985 cuando los terremotos mataron a miles de mexicanos.
En esta crónica de la lucha por su sobrevivencia encontrará
el lector su enorme carácter y fortaleza humana para no entrar en el mundo de
los muertos.
Años después de estos sucesos enfrentó una difícil lucha contra el cáncer a consecuencia de aquel
terrible estrés cuando se encontraba enterrado vivo. Fue su amor a la vida lo
que lo salvó dos veces de las garras de la muerte. En hora buena mi estimado y
gran amigo por ese merecido reconocimiento…
Por medio de esta
columna expreso mi más sentido pésame a
la familia de nuestro colega y amigo el periodista Cesar Adán Rentería por su
lamentable muerte ocurrida el jueves de la semana pasada.