Conjeturas
Por
Francisco Cruz Angulo
Es inconcebible que todos los partidos políticos no hayan
entendido el mensaje que enviaron los millones de ciudadanos por medio de su
voto en la pasada contienda electoral en donde se eligieron 12 gobernadores,
presidentes municipales y diputados locales.
En la susodicha elección del pasado 5 de junio, es del
conocimiento público que la alianza PRI-PVEM-PANAL sus candidatos a gobernador
fueron derrotados en 7 estados de la república; solo ganaron en 5, Hidalgo,
Oaxaca, Sinaloa, Tlaxcala y Zacatecas. La alianza PAN-PRD ganó Durango,
Veracruz y Quintana Roo. En cambio el PAN por sí solo ganó las gubernaturas de Aguascalientes,
Chihuahua, Puebla y Tamaulipas, en tanto que el PRD no logró ninguna victoria. Por
igual, MORENA contra lo que se esperaba no ganó ninguna gubernatura, aunque sin
duda el partido de López Obrador al igual que el blanquiazul fueron los dos
grandes ganadores en los pasados comicios.
En los distintos análisis que han realizado perdedores y
ganadores, el PRI y aliados justifican su derrota montándose en el discurso
discriminatorio de los altos jerarcas de la iglesia católica quienes sostienen
que la derrota del tricolor fue un claro rechazo a la iniciativa presidencial
de que se legalice el matrimonio igualitario de la comunidad gay, lésbica y transgénero
por considerar que con esa iniciativa se agrede a la familia tradicional
constituida por un hombre y una mujer y se violenta la moral y las buenas costumbres.
Es lamentable que el dirigente nacional del PRI, Manlio Fabio
Beltrones en ningún momento haya expresado que su derrota fue a consecuencia de
los gobernadores corruptos que se enriquecieron vorazmente a la sombra del
poder público y en total impunidad. Evidentemente fue un voto de castigo a esa
triple alianza encabezada por el tricolor.
Respecto al Partido Acción Nacional (PAN) sus candidatos
ganadores simplemente cacharon el voto antipriísta ya que los ciudadanos no tenían
otra opción.
Del Partido de la Revolución Democrática (PRD) el hecho de
haber alcanzado una votación promedio del 6% por sí solo en los 12 estados de
la república indica claramente la profundidad de su crisis interna. Es posible
que ni sumando su triunfo electoral en la Asamblea Constituyente logre
colocarse en el tercer lugar como fuerza política nacional.
En cuanto a los resultados que obtuvo el Movimiento de
Regeneración Nacional (MORENA) no son los que presumía López Obrador antes de
la elección. Su votación efectiva en los 12 estados de la república apenas le
alcanzó un promedio del 10%, es decir dos puntos más respecto a la elección
anterior. Sin embargo al agregársele esta votación a la que alcanzó en la
Ciudad de México es probable que se coloque en el tercer lugar como fuerza política
electoral.
Como señalamos arriba los partidos que triunfaron fue a consecuencia
del hartazgo y la desconfianza a los partidos políticos en el poder. Esto explica
la alternancia en el gobierno en 9 estados de la república.
Pues bien de haber hecho una buena lectura de los resultados
electorales pasados las bancadas del PRI, PVEM, PAN, PRD, PT y PANAL
representados en el Senado de la República estaban obligados a actuar en
congruencia cuando se debatió en comisiones y se aprobó en el pleno la Ley General
del Sistema Nacional Anticorrupción y la Ley secundaria de Responsabilidades de los Servidores Públicos, mejor conocida
como ley “3 de 3”.
Antes y después del proceso electivo los dirigentes
nacionales de las tres fuerzas más importantes en el país, PRI, PAN y PRD se habían
comprometido a incluir la iniciativa ciudadana tal y como fue presentada por
630 mil ciudadanos en el sentido de hacer pública su declaración patrimonial,
fiscal y de interés.
Resulta que todo fue una farsa. Desde que se dictaminó y se
aproó esta ley –el martes por la madrugada-en comisiones esa iniciativa “3 de 3”
fue pateada para adelante con argumentos ridículos de parte de 59 senadores que
votaron para que no se incluyera la ley “3
de 3” echándole la bolita a una comisión de notables ciudadanos que serán los
responsables de indicar que información o no debería ser del dominio público
argumentado la seguridad y la protección de datos de los servidores públicos. Por
cierto esta comisión de ciudadanos notables se integrará hasta cuando les pegue
la gana.
Otro dato interesante que nos da una buena imagen de lo impúdico
de nuestros representantes populares es el caso de cuatro senadores del PAN,
tres del PRD y seis senadores del PT cuyo líder es nada menos que el ex
secretario de gobernación priísta y ahora petista Manuel Bartlett, legisladores
muy cercanos a López Obrador, dirigente nacional de MORENA. Los senadores antes
señalados manejando una doble moral pública algunos abandonaron la sala del
pleno para no votar y otros se abstuvieron.
El comportamiento de los senadores del PRI-PVEM-PANAL ya era
previsible. Pese a que se desgarraban las vestiduras en contra de la corrupción
nunca se comprometieron a aprobar la llamada ley “3 de 3”. Era obvio. No iban a
ponerse la soga al cuello.
Después de esta bofetada a la demanda ciudadana de que se
castigue a fondo la corrupción de los servidores públicos ¿con qué cara van a
presentarse a los electores a demandar un voto de confianza en las elecciones
del 2017 y 2018?
Es más es tal el cinismo de nuestra clase política que
aprobaron para que los empresarios que tengan relaciones comerciales con el
sector público y sus trabajadores de confianza presenten la declaración “3 de 3”
lo que huele a una clara venganza en contra de miles de empresarios que se
solidarizaron con la iniciativa “3 de 3”. Es como decirles para que no vuelvas
a entrometerte en lo que no te importa pues todos estamos en el mismo carro…