Conjeturas
Por
Francisco Cruz Angulo
La Universidad Autónoma
de Nayarit (UAN) no dispone del suficiente personal docente, administrativo y
de equipamiento escolar para que accedan miles de estudiantes que se quedaron
fuera de esa institución.
Si la solución fuera de las buenas intenciones del Rector
Juan López Salazar no habría mayor problema.
Ante la exigencia de los estudiantes rechazados la FEUAN
ofreció 500 espacios previo nuevo examen que será aplicado en el curso de este
mes a los miles de estudiantes que no encontraron espacio en alguna escuela.
De hecho es un mejoralito que no resuelve de fondo la ampliación
de la oferta educativa Medio Superior en esa institución.
Es más con el ingreso de esos 500 alumnos complicará la
situación académica y financiera de la UAN.
En la primera situación a más número de alumnos en cada salón
de clases decaerá la calidad de la enseñanza-aprendizaje pues exigirá un mayor esfuerzo
de los profesores que enseñan en condiciones deplorables. No es lo mismo enseñar
a 30 estudiantes que es la media ideal para atender un grupo que a 60 alumnos atiborrados.
Si la rectoría optara por crear más grupos entonces tendría que
enfrentar el problema en la construcción de más aulas, lo que exigirá disponer
de más recursos económicos para construir, equipar y contratar nuevo personal
docente.
Su actual situación financiera que es del orden de un mil
millones de pesos al año provenientes el 88% de la federación y el 12% del
Estado asignada para ejercer este año es insuficiente y no alcanza la cobija
para cubrir la creciente demanda estudiantil que sumada a los de nuevo ingreso
alcanzará la enorme cifra de casi 30 mil alumnos, en su mayoría de
preparatorianos.
Los dirigentes del SETUAN, diputado Luis Manuel Hernández
Escobedo y SPAUAN, Carlos Muñoz Barragán así lo han reiterado numerosas veces
ante el Consejo General Universitario y a la opinión pública.
Ambos líderes señalan que no basta la reingeniería financiera
de la UAN sino que es urgente que toda la comunidad universitaria alce la voz y
demande a que el Gobierno Estatal y Federal incremente el presupuesto
financiero a esa institución de acuerdo a su crecimiento escolar.
Al Gobierno Federal se le ha solicitado desde hace tiempo el
reconocimiento de más plazas docentes sin respuesta alguna, lo que impide la contratación
de profesores de medio y tiempo completo y desarrollar la investigación científica
y tecnológica que son inherentes a la universidad.
De haber una mayor inversión en estas áreas del conocimiento
la UAN pudiera generar recursos propios mediante convenios con el sector
productivo del Estado.
El otro acceso a recursos es la entrega del impuesto del 12%
que captan los ayuntamientos y que deberían ser entregados a tiempo y
oportunamente al Patronato de la universidad. Sin embargo no ha ocurrido así. Una
buena parte de los alcaldes desvían esos recursos sin consecuencia alguna pese
a que el Congreso del Estado legisló al respecto.
Si a todo lo anterior agregamos que en el curso de este
sexenio pasarán a retiro por jubilación decenas de profesores y trabajadores de
esa Máxima Casa de Estudios podría generar una explosiva crisis financiera en el
fideicomiso del sistema de pensiones y jubilaciones.
Ante este panorama es urgente que una vez de inicio el ciclo
escolar se movilice la comunidad universitaria ante las autoridades competentes
del Estado y de la federación para que en sus próximos presupuestos de egresos
en materia de educación media superior sea incrementado.
Si el gobierno de Enrique Peña Nieto considera a la educación como el
principal eje para el desarrollo de la economía nacional y al combate a la
desigualdad social este objetivo deberá reflejarse en los hechos. El apoyo a la
educación pública deberá ser inobjetable y prioritario…